Considerando,
que el poder emana de los ciudadanos,
que los ciudadanos son los verdaderos soberanos de su nación y que esa es la fuerza que sostiene toda democracia,
que los hombres y mujeres nacemos iguales y permanecemos iguales ante la ley,
que los representantes han demostrado largamente no tener un genuino compromiso con los ciudadanos,
que la representatividad es débil y servil ante la corrupción,
que no nacemos para ser gobernados, entonces
UN NUEVO PACTO
ES POSIBLE Y NECESARIO
LA CORRUPCIÓN
PUEDE SER DERROTADA
Hacer un Nuevo Pacto, repensar y refundar nuestra democracia es posible y necesario porque no podemos permitirnos continuar eludiendo la tarea de enfrentar de manera seria y permanente la corrupción. De lo contrario, jamás saldremos del pozo en el que nos sumerge, jamás saldremos del atraso.
Sí es posible derrotar la corrupción, Singapur lo hizo. En Canadá, Dinamarca, Finlandia, Países Bajos, Nueva Zelanda y muchos otros países la corrupción en el Estado son hechos anómalos.
En 2023 la Defensoría del Pueblo estimó que los peruanos perdimos por actos de corrupción $18 millones todos los días.
¿Qué podríamos hacer con todo ese dinero?:
Todos los días tendríamos el presupuesto para construir un colegio emblemático o 30 escuelas rurales pequeñas.
Cada 25 días tendríamos el presupuesto para construir un nuevo hospital debidamente equipado.
Todos los días habríamos tenido el presupuesto necesario para producir 3600 respiradores artificiales durante la pandemia.
En menos de un año tendríamos los mismos recursos que se destinaron el 2023 para prevenir y afrontar el impacto del fenómeno del niño.
En 39 días tendríamos el presupuesto para realizar los Juegos Panamericanos.
En 110 días podríamos costear la ampliación que se realiza en el Aeropuerto Jorge Chávez.
En menos de un año tendríamos recursos suficientes para construir un mega puerto como el de Chancay.
En resumen, la corrupción nos está robando el futuro. ¿Hasta cuándo arrastraremos estas cadenas?
C=M+D-T
Corrupción = Monopolio de la toma de decisiones + Discrecionalidad – Transparencia
Para derrotar la corrupción debemos atacar su fórmula
– SOMOS LIBRES, SEÁMOSLO SIEMPRE –
NIBIRU
LA SOCIEDAD ESPIRAL
Como si necesitásemos tutores. Como si fuésemos niños que deben ser guiados. Como si no pudiéramos hacer más que una cruz en un papel cada 3 o 5 años… Así no se construye una genuina democracia. Para romper las cadenas de la representatividad es necesario que demos paso al nacimiento de nuevos ciudadanos. Es urgente:
1. Una revolución educativa que se enfoque en formar ciudadanos en lugar de mano de obra. Como primer paso, incorporar a la currícula escolar la enseñanza de la Gestión Pública.
2. Incorporar la enseñanza de la Gestión del mundo interior en las escuelas. Conocer la fuerza del amor. Elevar la consciencia para abrazar el bien común.
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